RUTA CIRCULAR POR LA RING ROAD O ROAD 1.
ORIGEN Y PUNTO FINAL: RAYKJAVIK
Presentación:
Acceso y salida del país:
La dificultad de llegar en barco es obvia por la distancia existente con el resto del continente, por lo que el avión es sin duda la mejor opción. Apenas cuatro horas de avión separan este país de España, por lo que la posibilidad de toparse con la naturaleza más pura está al alcance de la mano.
Otras opciones comunes desde donde llegar son Londres, Glasgow, París, Bruselas, Amsterdam, Oslo...
El aeropuerto internacional de Keflavik se encuentra a 50 kilómetros al oeste de la capital.
Sobre Reykjavik:
Se trata de una ciudad tranquila, en consonancia con la personalidad de los islandeses. Está ubicada al sudoeste del país, en la bahía de Faxaflói, un área costera que se caracteriza por la presencia de penínsulas, ensenadas, estrechos y pequeñas islas. Es una ciudad muy dispersa, y buena parte de ella se halla sobre la península de Seltjarnarnes. La mayor zona urbana se presenta en forma de suburbios de baja densidad, con casas muy espaciadas entre sí.
Reykjavik está atravesada por el río Ellidaá, que además es el más grande de la ciudad, aunque no es navegable.
Aproximadamente un 40% de la población total de la isla viven en su capital (el 60% si se tiene en cuenta el área metropolitana), que cuenta con la particularidad de ser la más norteña del globo terráqueo.
La industrialización del siglo XVIII trajo consigo el crecimiento urbano, y la industria del algodón, la pesca, la extracción de sulfuro, la agricultura y la construcción de barcos después, trajeron la riqueza a la isla.
Particularidades del país:
La cascada más caudalosa de Europa (Dettifoss), el glaciar más grande -en cuanto a volumen- del continente (Vatnajökull, con 8.100km2), más de 200 volcanes, el parque nacional más grande de Europa (Vatnajokull, con 12.000km2), el géiser que ha expulsado agua hasta el punto más alto (Geisyr; 122m)... todo aquí es superlativo, inmenso. Y al mismo tiempo, raro y genial.
> Otro paraje natural espectacular es el Parque Nacional Thingvellir, donde la dorsal atlántica separa las placas tectónicas de Norteamérica y Eurasia.
> En abril de 2010, el volcán Eyjafjallajökull puso patas arriba el espacio aéreo del mundo entero, en lo que fue una de las erupciones más sonadas que se recuerdan.
> Según un estudio de la Universidad de Arizona, Islandia se eleva hasta 3,5 centímetros cada año por el deshielo de los glaciares. Y la causa principal no es otra que el calentamiento global.
> El clima en Islandia es duro, pero los meses de junio, julio y agosto son ideales para visitar el país, con noches tan claras como el día. En invierno, en cambio, los islandeses apenas disponen de cuatro horas diarias de luz solar.
> Debido a diversos condicionantes, la flora en Islandia no es particularmente rica, pero se estima que actualmente comprende unas 440 especies de plantas con flores, junto con 40 helechos, 600 briófitos (musgos y hepáticas) y 735 líquenes. Los hongos superan las 2000 especies.
> Al igual que la flora, la fauna se ha adaptado a las condiciones extremas que se dan en Islandia.
> Los islandeses poseen su idioma, conocido como "el latín del norte". Aparte de su complejidad, llama la atención el empleo de metáforas en vez de usar sustantivos para denominar algo. Ejemplo de ello es que al mar abierto lo conocen como "camino de la ballena", o a su capital Reykjavik como "bahía de humo" por las aguas termales que rodean la ciudad. Y más de lo mismo con el topónimo de la isla: Islandia, "la tierra del hielo".
> La acampada es libre. Esto es, uno puede acampar donde le plazca, siempre y cuando no sea en una zona protegida debidamente señalizada.
> El país posee una de las rentas per cápita más altas del mundo: 39.500 euros al año. De ahí que una cerveza en un bar raramente baje de los 8-9 euros. ¡Te sabe a gloria!
Y, pese a las bajas temperaturas y los altos precios, los islandeses disfrutan de una vida social más que interesante. No en vano la marcha nocturna de Reykjavik es una de sus señas de identidad.
> Islandia acaba de ser nombrado el segundo país más feliz del mundo según la ONU, sólo por detrás de Suiza. Además figura entre los lugares más seguros del planeta, con un único homicidio al año de media.
> En el país no hay ejército. Ni tampoco fuerza aérea alguna. Eso sí, las prestaciones sociales son altísimas y apenas hay hospitales o escuelas privadas, puesto que la calidad de lo público es excelente.
> Julio Verne situó aquí su novela "Viaje al centro de la tierra". En ella los protagonistas acceden a las entrañas del planeta, concretamente desde el volcán Snaefellsjökull.
Historia:
Una de las teorías afirma que los primeros habitantes llegaron a la isla en el siglo VIII, y que lo hacían desde Irlanda o Escocia, aunque la más extendida habla de que fueron los escandinavos quienes llegaron y se asentaron entre finales del siglo X e inicios del XI.
Ya hacia el año 930, los vikingos noruegos fundaron el Alping, el primer parlamento legislativo y judicial del mundo, donde se dictaban las leyes y se castigaban a los criminales. Duró hasta el año 1232, y se ubicó en el conocido Parque Nacional Thingvellir.
A partir de este momento, un tratado situó al país bajo la corona noruega hasta finales del siglo XIV, para posteriormente entrar en escena los reinos de Dinamarca y Suecia uniéndose al de Noruega. Los tres formaron la "Unión de Kalmar", la unión de las tres monarquías nórdicas.
Durante los siglos posteriores Islandia se convirtió en uno de los países más pobres de Europa. Los suelos estériles, las erupciones volcánicas y un clima realmente duro hacían que la vida fuese muy difícil para una sociedad que dependía prácticamente en su totalidad de la agricultura. Después dos epidemias de peste negra a comienzos y principios del siglo XV barrieron a la población, matando casi a la mitad de sus habitantes.
Ya a mediados del siglo XVI, se impuso el luteranismo -movimiento religioso protestante inspirado en las enseñanzas de Martín Lutero sobre el cristianismo-, confesión dominante en la actualidad.
En los siglos XVII-XVIII Dinamarca impuso una serie de estrictas restricciones al comercio, y una epidemia de viruela causó la muerte de alrededor de un tercio de la población.
En 1783 el volcán Laki entró en erupción, y se produjo una de las mayores catástrofes medioambientales de la historia del continente. Duró 8 meses y fue uno de los acontecimientos climáticos más importantes y con mayores repercusiones sociales que se recuerdan; una enorme nube fue extendiéndose poco a poco, trayendo consigo una hambruna generalizada que supuso la muerte por inanición de un cuarto de la población.
Tras las guerras napoleónicas (1814), Islandia permaneció como una dependencia danesa, aunque las relaciones no fueron precisamente buenas. Muestra de ello fue la prohibición del consumo de alcohol en 1915 (incluida la cerveza, por considerarse antipatriótica), porque decían que representaba el modo de vida danés.
Durante este siglo, las duras condiciones climáticas hicieron que se produjese una emigración en masa hacia un mundo mejor, llegando a desplazarse a otros países 15.000 de las 70.000 personas que habitaban la isla en ese momento. Paralelamente surgió un nuevo movimiento nacionalista de independencia bajo el liderazgo de Jón Sigurdsson, y ya en 1874 Dinamarca le concedió una constitución y un gobierno limitado.
Ya durante la II Guerra Mundial, Islandia estuvo bajo el dominio británico primero y el americano después, y fue en 1944 cuando el país se convirtió en una República con Sveinn Björnsson como primer presidente.
En la última década Islandia ha pasado por momentos convulsos, como lo ocurrido entre 2003 y 2007, cuando el país transformó su economía -basada entonces en la industria pesquera- pasando a ser una nación que ofrecía sofisticados servicios financieros, es decir, yendo a la conquista de mercados internacionales. Esta transformación derivó en una posterior crisis financiera, que supuso que entre 2008 y 2009 se produjese la mayor emigración de Islandia desde 1887.
Posteriormente a principios de 2009 el gobierno se vio obligado a dimitir, tras las numerosas protestas ciudadanas. Se produjeron elecciones y se estableció una asamblea popular de 25 personas al azar y sin afiliación política, a la que se delegó la responsabilidad de preparar una propuesta para sustituir la constitución del país (únicamente era necesario que contasen con al menos 25 votos).
Actualmente el país se ha recuperado casi en su totalidad de la crisis financiera vivida en los últimos años, aunque llama la atención que en dos ocasiones se han negado los islandeses a pagar la deuda de sus bancos con clientes extranjeros.
Planning por la Ring Road:
A) Reykajvik-Höfn; recorriendo el sur en 7 etapas.
B) Höfn-Myvatn: 5 etapas para conocer el este del país, y dos más para visitar los alrededores del lago Myvatn.
C) Myvatn-Reykjavik: otras 5 etapas para conocer el norte del país y regresar hasta la capital.
D) Un par de días en coche por el Golden Circle o "Círculo Dorado" y la península de Reykjanes.

Cascada Öxarárfoss.
Situada el parque nacional Þingvellir, se encuentra en el curso del río Öxará, que en este punto fluye por un campo de lava y se precipita por una de las paredes de la falla tectónica de Almannagjá. Se cuenta que el curso del río fue desviado hacia este lugar para abastecer de agua a los miembros del Alþingi.
Conclusiones:
ORIGEN Y PUNTO FINAL: RAYKJAVIK
Presentación:
Se trata de un país joven en comparación con la mayoría de los países europeos, tanto por la presencia humana en la isla -la cual comienza a finales del siglo IX- como por la formación de la superficie terrestre, pues se formó hace apenas 20 millones de años tras una serie de erupciones volcánicas.
Situado al norte del globo, Islandia es un país diferente, con unas características que lo hacen único. Y esta disparidad llega hasta tal punto de que no sería descabellado decir que no hay un paraíso igual en el hemisferio norte. Porque hablar de Islandia es hablar de naturaleza; lagos, volcanes, glaciares, cascadas, géiseres... y el doble de ovejas que habitantes.
Con aspecto lunático, el noreste del país es una tierra semidesierta. Al otro lado, en cambio, se encuentran los fiordos del oeste, sin duda espectaculares. Y el sur es verde, con amplias praderas en las faldas de los volcanes salpicadas de cascadas, sin olvidar los acantilados que se precipitan sobre la playa negra de Vik, y de las imponentes columnas de basalto con forma hexagonal que se encaraman desde el mar.
Todo el país cuenta con poco más de 300.000 habitantes, de los que 120.000 residen en su capital (ninguna otra ciudad islandesa supera los 50.000). Su superficie se extiende hasta los 103.00 km2, parecido al área que ocupa Andalucía. La isla está suspendida en el océano Atlántico, casi pegada al Círculo Polar Ártico.
Y, para conocer esto y mucho más, nada mejor que recorrer la isla a pedales por la Ring Road, la carretera que circunda el país por escenarios de ensueño, la que te hace sentir la naturaleza en todo su esplendor a través de rectas infinitas, con fumarolas que parecen salir de la nada, rodeando volcanes, y yendo expuesto a los "golpes" del viento cada vez uno se aproxima al mar.
Situado al norte del globo, Islandia es un país diferente, con unas características que lo hacen único. Y esta disparidad llega hasta tal punto de que no sería descabellado decir que no hay un paraíso igual en el hemisferio norte. Porque hablar de Islandia es hablar de naturaleza; lagos, volcanes, glaciares, cascadas, géiseres... y el doble de ovejas que habitantes.
Con aspecto lunático, el noreste del país es una tierra semidesierta. Al otro lado, en cambio, se encuentran los fiordos del oeste, sin duda espectaculares. Y el sur es verde, con amplias praderas en las faldas de los volcanes salpicadas de cascadas, sin olvidar los acantilados que se precipitan sobre la playa negra de Vik, y de las imponentes columnas de basalto con forma hexagonal que se encaraman desde el mar.
Todo el país cuenta con poco más de 300.000 habitantes, de los que 120.000 residen en su capital (ninguna otra ciudad islandesa supera los 50.000). Su superficie se extiende hasta los 103.00 km2, parecido al área que ocupa Andalucía. La isla está suspendida en el océano Atlántico, casi pegada al Círculo Polar Ártico.
Y, para conocer esto y mucho más, nada mejor que recorrer la isla a pedales por la Ring Road, la carretera que circunda el país por escenarios de ensueño, la que te hace sentir la naturaleza en todo su esplendor a través de rectas infinitas, con fumarolas que parecen salir de la nada, rodeando volcanes, y yendo expuesto a los "golpes" del viento cada vez uno se aproxima al mar.
Sobre la Ring Road:
Con 1.340 kilómetros, la Ring Road es ideal para quienes desean aventurarse por la isla y recorrerla a su gusto, pues permite visitar la mayor parte de lugares turísticos del país sin apenas desviarse de ella. Transcurre la mayor parte del tiempo por zonas no habitadas, donde los animales campan a sus anchas.
Con 1.340 kilómetros, la Ring Road es ideal para quienes desean aventurarse por la isla y recorrerla a su gusto, pues permite visitar la mayor parte de lugares turísticos del país sin apenas desviarse de ella. Transcurre la mayor parte del tiempo por zonas no habitadas, donde los animales campan a sus anchas.
La carretera parte de su capital Reykjavik, y traza un inmenso círculo recorriendo las principales localidades y espacios naturales de Islandia. Así pues, yendo en contra de las agujas del reloj, nos encontramos con las principales poblaciones del país: Sellfoss, Vik, Höfn, Egilsstaðir, Akuteyri, Blönduós y Borgarnes.
A pesar de ser la principal ruta de comunicación terrestre, la Ring Road es una carretera de un sólo carril en cada sentido durante la mayor parte de su recorrido, a excepción de algunos pequeños tramos en la circunvalación de Reykjavik. Además, la particular distribución de la población islandesa hace que aunque en los alrededores de la capital haya bastante tráfico, no lo haya en cambio a lo largo del resto del recorrido.
La carretera se encuentra en buenas condiciones, si bien en algunos tramos de las zonas más orientales el asfalto deja paso a pistas de tierra y gravilla. Las obras finalizaron en el año 1974 con la construcción del puente más largo del país, el cual debía cruzar el río Skeidara, al sur de la isla.
La bici, la protagonista de este viaje. Sin duda la mejor forma de recorrer el país.
Acceso y salida del país:
La dificultad de llegar en barco es obvia por la distancia existente con el resto del continente, por lo que el avión es sin duda la mejor opción. Apenas cuatro horas de avión separan este país de España, por lo que la posibilidad de toparse con la naturaleza más pura está al alcance de la mano.
Otras opciones comunes desde donde llegar son Londres, Glasgow, París, Bruselas, Amsterdam, Oslo...
El aeropuerto internacional de Keflavik se encuentra a 50 kilómetros al oeste de la capital.
Sobre Reykjavik:
Se trata de una ciudad tranquila, en consonancia con la personalidad de los islandeses. Está ubicada al sudoeste del país, en la bahía de Faxaflói, un área costera que se caracteriza por la presencia de penínsulas, ensenadas, estrechos y pequeñas islas. Es una ciudad muy dispersa, y buena parte de ella se halla sobre la península de Seltjarnarnes. La mayor zona urbana se presenta en forma de suburbios de baja densidad, con casas muy espaciadas entre sí.
Reykjavik está atravesada por el río Ellidaá, que además es el más grande de la ciudad, aunque no es navegable.
Aproximadamente un 40% de la población total de la isla viven en su capital (el 60% si se tiene en cuenta el área metropolitana), que cuenta con la particularidad de ser la más norteña del globo terráqueo.
La industrialización del siglo XVIII trajo consigo el crecimiento urbano, y la industria del algodón, la pesca, la extracción de sulfuro, la agricultura y la construcción de barcos después, trajeron la riqueza a la isla.
Estatua de Leif Eriksson, frente a la Hallgrímskirkja o catedral de Cristo Rey en Reykjavik.
La estatua del hijo del famoso “Erik el Rojo” se halla frente a la catedral Luterana de Reykjavik, cuya estructura en forma de nave espacial simula estar levantada con columnas de basalto.
Uno de los muchos espacios verdes de Reykjavik
Pescando en los alrededores de Reykjavik.
Al igual que el mar, los ríos y lagos de agua dulce que surcan la isla han forjado la historia del pueblo islandés, dedicado desde tiempos inmemoriales a la pesca de altura y bajura. Dos de las especies fluviales capturadas en los ríos de Islandia más preciadas son el salmón y la trucha. La práctica de pesca con caña en los ríos es muy popular, y en la mayoría de éstos se han instalado refugios y demás alojamientos, equipados con todo lo necesario.
Al igual que el mar, los ríos y lagos de agua dulce que surcan la isla han forjado la historia del pueblo islandés, dedicado desde tiempos inmemoriales a la pesca de altura y bajura. Dos de las especies fluviales capturadas en los ríos de Islandia más preciadas son el salmón y la trucha. La práctica de pesca con caña en los ríos es muy popular, y en la mayoría de éstos se han instalado refugios y demás alojamientos, equipados con todo lo necesario.
La cascada más caudalosa de Europa (Dettifoss), el glaciar más grande -en cuanto a volumen- del continente (Vatnajökull, con 8.100km2), más de 200 volcanes, el parque nacional más grande de Europa (Vatnajokull, con 12.000km2), el géiser que ha expulsado agua hasta el punto más alto (Geisyr; 122m)... todo aquí es superlativo, inmenso. Y al mismo tiempo, raro y genial.
Cascada Dettifoss (cascada dek agua que desaparece). Tiene 100 metros de ancho y una caída de
44m.
> Otro paraje natural espectacular es el Parque Nacional Thingvellir, donde la dorsal atlántica separa las placas tectónicas de Norteamérica y Eurasia.
> En abril de 2010, el volcán Eyjafjallajökull puso patas arriba el espacio aéreo del mundo entero, en lo que fue una de las erupciones más sonadas que se recuerdan.
> Según un estudio de la Universidad de Arizona, Islandia se eleva hasta 3,5 centímetros cada año por el deshielo de los glaciares. Y la causa principal no es otra que el calentamiento global.
> El clima en Islandia es duro, pero los meses de junio, julio y agosto son ideales para visitar el país, con noches tan claras como el día. En invierno, en cambio, los islandeses apenas disponen de cuatro horas diarias de luz solar.
El clima puede cambiar en un momento... sin previo aviso.
> Debido a diversos condicionantes, la flora en Islandia no es particularmente rica, pero se estima que actualmente comprende unas 440 especies de plantas con flores, junto con 40 helechos, 600 briófitos (musgos y hepáticas) y 735 líquenes. Los hongos superan las 2000 especies.
> Al igual que la flora, la fauna se ha adaptado a las condiciones extremas que se dan en Islandia.
“Zarapito
trinador” (ave que se reproduce en el norte de Europa) sobre un cairn.
Este montículo de piedras, que en la antigüedad se erigía como punto de referencia, es un monumento sepulcral usado también en el ámbito de la astronomía.
Este montículo de piedras, que en la antigüedad se erigía como punto de referencia, es un monumento sepulcral usado también en el ámbito de la astronomía.
> La acampada es libre. Esto es, uno puede acampar donde le plazca, siempre y cuando no sea en una zona protegida debidamente señalizada.
> El país posee una de las rentas per cápita más altas del mundo: 39.500 euros al año. De ahí que una cerveza en un bar raramente baje de los 8-9 euros. ¡Te sabe a gloria!
Y, pese a las bajas temperaturas y los altos precios, los islandeses disfrutan de una vida social más que interesante. No en vano la marcha nocturna de Reykjavik es una de sus señas de identidad.
> Islandia acaba de ser nombrado el segundo país más feliz del mundo según la ONU, sólo por detrás de Suiza. Además figura entre los lugares más seguros del planeta, con un único homicidio al año de media.
> En el país no hay ejército. Ni tampoco fuerza aérea alguna. Eso sí, las prestaciones sociales son altísimas y apenas hay hospitales o escuelas privadas, puesto que la calidad de lo público es excelente.
> Julio Verne situó aquí su novela "Viaje al centro de la tierra". En ella los protagonistas acceden a las entrañas del planeta, concretamente desde el volcán Snaefellsjökull.
Historia:
Una de las teorías afirma que los primeros habitantes llegaron a la isla en el siglo VIII, y que lo hacían desde Irlanda o Escocia, aunque la más extendida habla de que fueron los escandinavos quienes llegaron y se asentaron entre finales del siglo X e inicios del XI.
Ya hacia el año 930, los vikingos noruegos fundaron el Alping, el primer parlamento legislativo y judicial del mundo, donde se dictaban las leyes y se castigaban a los criminales. Duró hasta el año 1232, y se ubicó en el conocido Parque Nacional Thingvellir.
A partir de este momento, un tratado situó al país bajo la corona noruega hasta finales del siglo XIV, para posteriormente entrar en escena los reinos de Dinamarca y Suecia uniéndose al de Noruega. Los tres formaron la "Unión de Kalmar", la unión de las tres monarquías nórdicas.
Durante los siglos posteriores Islandia se convirtió en uno de los países más pobres de Europa. Los suelos estériles, las erupciones volcánicas y un clima realmente duro hacían que la vida fuese muy difícil para una sociedad que dependía prácticamente en su totalidad de la agricultura. Después dos epidemias de peste negra a comienzos y principios del siglo XV barrieron a la población, matando casi a la mitad de sus habitantes.
Ya a mediados del siglo XVI, se impuso el luteranismo -movimiento religioso protestante inspirado en las enseñanzas de Martín Lutero sobre el cristianismo-, confesión dominante en la actualidad.
En los siglos XVII-XVIII Dinamarca impuso una serie de estrictas restricciones al comercio, y una epidemia de viruela causó la muerte de alrededor de un tercio de la población.
En 1783 el volcán Laki entró en erupción, y se produjo una de las mayores catástrofes medioambientales de la historia del continente. Duró 8 meses y fue uno de los acontecimientos climáticos más importantes y con mayores repercusiones sociales que se recuerdan; una enorme nube fue extendiéndose poco a poco, trayendo consigo una hambruna generalizada que supuso la muerte por inanición de un cuarto de la población.
Tras las guerras napoleónicas (1814), Islandia permaneció como una dependencia danesa, aunque las relaciones no fueron precisamente buenas. Muestra de ello fue la prohibición del consumo de alcohol en 1915 (incluida la cerveza, por considerarse antipatriótica), porque decían que representaba el modo de vida danés.
Durante este siglo, las duras condiciones climáticas hicieron que se produjese una emigración en masa hacia un mundo mejor, llegando a desplazarse a otros países 15.000 de las 70.000 personas que habitaban la isla en ese momento. Paralelamente surgió un nuevo movimiento nacionalista de independencia bajo el liderazgo de Jón Sigurdsson, y ya en 1874 Dinamarca le concedió una constitución y un gobierno limitado.
Ya durante la II Guerra Mundial, Islandia estuvo bajo el dominio británico primero y el americano después, y fue en 1944 cuando el país se convirtió en una República con Sveinn Björnsson como primer presidente.
En la última década Islandia ha pasado por momentos convulsos, como lo ocurrido entre 2003 y 2007, cuando el país transformó su economía -basada entonces en la industria pesquera- pasando a ser una nación que ofrecía sofisticados servicios financieros, es decir, yendo a la conquista de mercados internacionales. Esta transformación derivó en una posterior crisis financiera, que supuso que entre 2008 y 2009 se produjese la mayor emigración de Islandia desde 1887.
Posteriormente a principios de 2009 el gobierno se vio obligado a dimitir, tras las numerosas protestas ciudadanas. Se produjeron elecciones y se estableció una asamblea popular de 25 personas al azar y sin afiliación política, a la que se delegó la responsabilidad de preparar una propuesta para sustituir la constitución del país (únicamente era necesario que contasen con al menos 25 votos).
Actualmente el país se ha recuperado casi en su totalidad de la crisis financiera vivida en los últimos años, aunque llama la atención que en dos ocasiones se han negado los islandeses a pagar la deuda de sus bancos con clientes extranjeros.
Planning por la Ring Road:
A) Reykajvik-Höfn; recorriendo el sur en 7 etapas.
Skógafoss (cascada del bosque).
Es una de las cascadas más grandes del país, con una caída de 60m. y una anchura de 25. Al caer el agua, debido a la cantidad de espuma que produce constantemente, un arco iris simple o doble es normalmente visible en los días soleados.
Es una de las cascadas más grandes del país, con una caída de 60m. y una anchura de 25. Al caer el agua, debido a la cantidad de espuma que produce constantemente, un arco iris simple o doble es normalmente visible en los días soleados.
Svartifoss (cascada negra).
Está rodeada por columnas basálticas negras, de origen volcánico, que le dan su nombre. Las columnas hexagonales fueron formadas por un proceso de cristalización dentro de un flujo de lava al enfriarse de manera extremadamente lenta. Formaciones similares a esta se encuentran en la Calzada de los Gigantes en Irlanda del Norte y en la isla de Staffa en Escocia.
Está rodeada por columnas basálticas negras, de origen volcánico, que le dan su nombre. Las columnas hexagonales fueron formadas por un proceso de cristalización dentro de un flujo de lava al enfriarse de manera extremadamente lenta. Formaciones similares a esta se encuentran en la Calzada de los Gigantes en Irlanda del Norte y en la isla de Staffa en Escocia.
Lengua glaciar Skaftafell.
Se trata de una lengua del glaciar Vatnajökull, el más grande de Islandia y uno de los más extensos de Europa, comparable al tamaño de Córcega. Tiene más de un kilómetro de espesor y se encuentra en el parque nacional de Skaftafell, en la región de Austurland, al sur del país.
Alrededores del pico Hvannadalshnjúkur, el punto más elevado de Islandia con sus 2109 metros de altura.
Acantilados de Vik y playa de arena negra.
Pedazos de hielo flotando en Jökulsárlón, el lago glaciar más grande de Islandia.
Puerto de Höfn.
Atajando por el paso de Oxi, en plena ascensión.
Se trata de una pista de tierra que atraviesa un puerto y que un atajo que puede tomarse al este de Islandia en la conocida carretera “Ring Road”, que circunda el país.
Se trata de una pista de tierra que atraviesa un puerto y que un atajo que puede tomarse al este de Islandia en la conocida carretera “Ring Road”, que circunda el país.
Colección privada de coches de un particular en Egilstaddir, al este del país.
Zona de renos en las Highlands de Islandia.
Las “tierras altas” es una zona desértica. Se encuentra por encima de los 400-500m. y se extiende por la mayor parte del interior del país.
Las “tierras altas” es una zona desértica. Se encuentra por encima de los 400-500m. y se extiende por la mayor parte del interior del país.
Alrededores de Dettifoss,
Poza de
agua caliente en la grieta de Grjótagjá
(alrededores de Myvatn).
Es una grieta con pozas subterráneas de agua caliente. Era un lugar donde se bañaba la gente hasta que la temperatura del agua llegó a ser peligrosa (unos 60 ºC) como resultado de las erupciones del volcán Krafla en los años 70.
Es una grieta con pozas subterráneas de agua caliente. Era un lugar donde se bañaba la gente hasta que la temperatura del agua llegó a ser peligrosa (unos 60 ºC) como resultado de las erupciones del volcán Krafla en los años 70.
Zona
geotérmica de Hverir.
Se encuentra alrededor del lago Mývatn (traducido como el “lago de las moscas enanas”), concretamente al este de la grieta Grjotagja y al oeste de la montaña Namafjall. Es una zona de gran actividad volcánica, y esto queda patente a distancia, pues el inconfundible olor a huevos podridos sirve de indicador. Pueden verse pozas con lodo y agua hirviendo, enormes y potentes fumarolas de gases, porciones de terreno con un color amarillento indicativo de áreas sulfurosas, etc.
Se encuentra alrededor del lago Mývatn (traducido como el “lago de las moscas enanas”), concretamente al este de la grieta Grjotagja y al oeste de la montaña Namafjall. Es una zona de gran actividad volcánica, y esto queda patente a distancia, pues el inconfundible olor a huevos podridos sirve de indicador. Pueden verse pozas con lodo y agua hirviendo, enormes y potentes fumarolas de gases, porciones de terreno con un color amarillento indicativo de áreas sulfurosas, etc.
Uno de los impresionantes atardeceres que se dan en la isla (afueras de Blönduos, al norte de Islandia).
Godaffoss, conocida también como "la cascada de los Dioses". Se encuentra en el curso del río Skjálfandafljót.
Descansando en una poza de aguas termales.
Típica iglesia islandesa.
D) Un par de días en coche por el Golden Circle o "Círculo Dorado" y la península de Reykjanes.
Lago Kleifarvatn.
Montoncitos de piedras junto al lago Pingvallavatn, en el Parque Nacional Þingvellir.
Cascada de Gullfoss.
Gheysir, el mayor géiser del país.
Parque Nacional de Thingvellir o Þingvellir.
Las fallas que atraviesan la región son visibles desde cualquier parte del parque. La más grande de todas ellas es la falla de Almannagjá, que forma un cañón de considerables proporciones y que es la causa principal de los habituales terremotos que se suceden en esta zona.
Parque Nacional de Thingvellir o Þingvellir.
Las fallas que atraviesan la región son visibles desde cualquier parte del parque. La más grande de todas ellas es la falla de Almannagjá, que forma un cañón de considerables proporciones y que es la causa principal de los habituales terremotos que se suceden en esta zona.
Cascada Öxarárfoss.
Situada el parque nacional Þingvellir, se encuentra en el curso del río Öxará, que en este punto fluye por un campo de lava y se precipita por una de las paredes de la falla tectónica de Almannagjá. Se cuenta que el curso del río fue desviado hacia este lugar para abastecer de agua a los miembros del Alþingi.
Hito con un símbolo
de apariencia celta, que sirve para indicar los puntos de interés o lugares
escénicos (P.N. de Thingvellir
o Þingvellir).
Se dice que entre un 20 y 25% de los
islandeses tendrían antepasados irlandeses o celtas.
Conclusiones:
Islandia es el país ideal para los amantes de la naturaleza; un país prácticamente despoblado, agradable, limpio, y sin duda recomendado para quienes busquen tranquilidad y quieran huir de las aglomeraciones turísticas. Recorrer la Ring Road supone tener al alcance de la mano visitar los principales atractivos del país, si bien algunos de estos lugares implican tener que salirse de vez en cuando de ella.
La bici es sin duda uno de los mejores medios para desplazarse por el país, si bien el coche puede ser una buena opción en el caso de no disponer de muchos días... y de tener bien llenos los bolsillos, pues el alquiler es carísimo.
Enamorarte del país es realmente sencillo, ya que los lugares que aguardan al viajero son realmente espectaculares. Los únicos hándicaps con los que uno puede encontrarse son tanto el alto precio de las cosas, como la climatología, si bien esto último puede ser menos duro si se dispone de fechas para poder elegir cuándo viajar, ya que el verano es más suave.
